sábado, 11 de febrero de 2012

Giges



Te he entregue el anillo que une nuestros destinos. Camino de salvación o de perdición ,si es que no eres capaz de dominar su perturbadora potencialidad.
Veo destrozado que, a cada uso que le das, no distingues que en vez de lograr un bien, recoges un mal. Tienes un poder tan grande que a cada instante te destruyes al usarlo ....Yo en mi mente digo: Si eres capaz de controlar su poder entonces has de ser capaz de soportar la vida ... o mejor dicho de construir una ... ser libre implica vislumbrar la esencia de la libertad

viernes, 10 de febrero de 2012

Yo morire .... (ya mori)

Yo moriré ... y  ... ¿Nadie se acordara de mi?




Hermoso vídeo realmente hermoso, tus ojos se posan sobre mi cabeza, lo único que conozco de ti, me absorbe mientras sigo escuchando .. Que bonito es un entierro ..... que bonito es un entierro .... y luego parpadeas y desapareces y recuerdo que jamas te conocí, o no lo se, tal vez ya conozco todo en ti sin haberte visto ... suspiros prolongados de resignación, no importa por que me dan mas vida al ser mas intensos o eso quiero creer :s

Morí el día en que me dijiste que el mundo que construí fue una farsa y que solo debía resignarme ..... reviví el día en que volví a sentir mi corazón palpitar creyendo volver a crear ese mundo tan lleno de intensidad ..... lastimosamente sientes miedo .... y te repliegas sobre ti .... recuerdas el dolor de tu tragedia y sientes ganas de volver a soñar con ahincó pero no puedes, el riesgo es grande y tu corazón no lo soportaría (una vez mas)


(Es increíble como puedo pasar de la primera persona a la segunda sin notarlo)

O.o

Por que rayos se me metió la idea de morir casto O.O .... haber, haber déjame ver; maldito Maximilien otra vez haciendo de las tuyas, no te basta con que tenga un proyecto dedicado a ti y me vienes con tus locuras, lo peor es que tu falta de carisma te hace carismaticamente admirable, no puedo negarte que pensarte mas humano de lo que dicen que fuiste es un atrevimiento inmenso, pero se que en algún momento deseaste vivir lo que de ti contare (o tal vez no) Da igual, se que la experiencia de salvar la virtud ha sido tu sueño y bueno, te consagrare a la virtud amigo mio; ojo no te esperes un lecho de rosas, ya que te espera una experiencia lúgubre; pero se que lo deseas en el fondo de ese corazón que sabe cuando debe bombear sangre a la cabeza. Pronto conocerás a tu princesa, sacada del mejor cuento de hadas, para que sepas lo que yo también deseo sentir algún día amigo mio. Quien como tu, que al menos ..... que al menos ..... que al menos lo podrás vivir en mi historia ... yo, en cambio,  pues yo, ....  no lo se, no se si lo sentiré .... no lo se (desearía estar en tu lugar ahora =P)

martes, 7 de febrero de 2012

A la sombra de una guillotina ... ¿Los infortunios de la virtud?

Advertencia (Si esta interesado en leer lo acá presentado, recomiendo leer esto al final):

La siguiente narración, puede ser perfectamente catalogada como una apología al terrorismo, ante ello señalo que si el lector es incapaz de ver en el monstruo algo mas que ello, pido se abstenga a la lectura, debido a su que olvido que todo monstruo es hombre. 

Te encuentras ante una historia apócrifa y pido comprensión por mi atrevimiento. Si has de juzgarme con desprecio, pues he de decirte que admiro tu interés, pues nadie que no haya leído lo acá presentado podría manifestar tal sentimiento hacia mi persona.

“Si vemos un acto de violencia o injusticia en una calle o en un camino, al instante brota un sentimiento de cólera y de indignación en el fondo de nuestro corazón que nos lleva a tomar la defensa del oprimido, pero un deber mas poderoso nos contiene y las leyes nos privan del derecho de proteger al inocente” (Rousseau, Cartas a Sofía)


La ensoñación

Ante ti una efigie se erige, no sabes como ni porque; solo ante ti se presenta rápidamente ¿escuchaste tu nombre? Tratas de acercarte; y al estar a unos metros esta se extingue y tú de vuelta a tu cama; solo fue un sueño… mas.

El joven abrió sus ojos de forma súbita, gotas de sudor se deslizaban por su pálido rostro; al sudor un leve lagrimeo se le sumo, luego dio un largo suspiro; giro la cabeza buscando en el velador que se hallaba al costado de su cama algún objeto en especial, en aquel mueble solo habían 3 objetos: Un reloj, un libro y un vaso que se hallaba vacío

El hombre miro el techo, en la rápida revisión realizada, el objeto que deseaba se hallaba incapaz de servir al fin deseado. Dio un largo suspiro en su cama y luego volvió a mirar el velador y cogió el libro, el susodicho no era un muy voluminoso, apenas igualaba el tamaño del príncipe de Maquiavelo; pero el sujeto lo sostuvo con un gran candor, como si ante el estuviera un ser vivo. Era una edición publicada en 1763, a la mente del hombre afloraron así los recuerdos de como aquel valioso y querido ejemplar llego a sus manos.

 “El hombre a nacido libre, y por doquier esta encadenado. Hay quien se cree amo de los demás, cuando no  es mas esclavo que ellos” (Rousseau, el contrato social)

Abres tus ojos, la mañana a llegado y el sol brilla de forma fantástica, hermosos haces de luz se manifiestan ante tu ventana y bañan el recinto creando un ambiente cuasi divino, sientes la necesidad de frotar tus ojos con tus pulgares, sientes un gran satisfacción al hacerlo; luego de ello te sientas en tu lecho, escuchas una voz gruesa proveniente del recibidor que exclama tu nombre, no dudas ni un instante y decides levantarte, te levantas y te aproximas a un pequeño baúl donde guardas tus ropas,  levantas la tapa y en aquel momento recuerdas que este día iras a visitar a tus tíos por lo cual buscas alguna ropa adecuada para la ocasión; tu repertorio de prendas es bastante limitado, lamentas no poder poseer algo mas que ropas gastadas, pero dejas de lado aquel remordimiento y buscas algo mínimamente decente.

Luego de unos minutos te hayas listo para poder realizar la visita, así pues partiste hacia el recibidor de tu casa; una vez llegaste, ves a tus hermanos menores esperando completamente listos, tu padre se haya vestido con mucha elegancia a pesar de usar prendas antiguas; no es tampoco su culpa, un conjunto resulta demasiado caro y no puede darse el lujo de comprar muchos y menos con una familia tan basta que mantener. Ello explica por qué tu padre en la mayoría de ocasiones te impedía salir a jugar fuera de casa en el campo, ante ello tú procedías de forma rebelde escapando de casa y dando largos paseos por el bosque. A pesar de gozar de una gran sensibilidad jamás pudiste expresarla con la intensidad necesaria a tus semejantes; casi todos tus familiares ven en ti un cadáver andante, no eres mas que un ser decadente para ellos; solo tu tío es el único que ve en ti un hombre vivísimo.

Tu padre y hermanos marchan a la mesa y tú los sigues, luego de un breve desayuno proceden a marchar hacia la casa de tu tío, un pequeño carruaje espera  por todos en la puerta, proceden a subir y tu busca asiente cerca de la ventana, adoras sentir el aire golpear tu rostro… adoras poder sentirte distinto a como te ves. Tu padre te mira de reojo y exclama ¡Maxime!; sacas tu cabeza de la ventana del carruaje y suspiras lentamente.

Un golpe discreto y agudo se manifestó en la puerta del cuarto, el hombre perdió la concentración y sus recuerdos se disipaban; lamentado el hecho de no poder retenerlos un poco mas, por lo cual exclamo algo irritado.
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      -¿Qué se os ofrece?

Ante la cuestión planteada una voz femenina rápidamente respondió
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       -Ciudadano, solo toco para comprobar si se hallaba despierto, pero como siempre mi llagada tiende a coincidir con su despertar, solo atino a preguntar si ¿Se le ofrece algo?

El hombre miro su velador nuevamente, y en él ubico el vaso vacío; noto que en lo breves momentos de ensoñación su garganta se seco de forma súbita, ante lo cual ahora deseaba sesear su sed y no solo calmar sus pesadillas.
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        -Un vaso de agua seria algo fantástico y apropiado, ante ello soy incapaz de negarme
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         -Espere un poco ciudadano que en momentos os traeré un poco de agua para que pueda saciar tan intensa necesidad

La voz femenina dejo de escucharse y el hombre volvió a sus memorias.